La pandemia de COVID-19 ha exacerbado las desigualdades sociales y económicas preexistentes, en particular para los BIPOC y los trabajadores indocumentados concentrados en industrias de bajos salarios. El sistema público de desarrollo de la mano de obra es clave en la creación de oportunidades para la movilidad socioeconómica, pero ha luchado para servir de manera significativa a los solicitantes de empleo y trabajadores más marginados de California.
Nuevos rumbos en la justicia racial y económica: Cómo los centros de trabajadores de California están llevando el poder de los trabajadores al desarrollo de la mano de obra concluye que los centros de trabajadores son actores inestimables en el sistema público de desarrollo de la mano de obra del estado. Los centros de trabajadores -organizaciones comunitarias creadas por y para personas BIPOC e inmigrantes en busca de empleo y trabajadores de sectores con salarios bajos- proporcionan una alternativa integral al statu quo del desarrollo de la mano de obra mediante el fomento del desarrollo del liderazgo, la creación de movimientos y el cambio sistémico.
Los puntos clave son:
Los centros de empleo demuestran que es posible llegar a los trabajadores con salarios más bajos y a sectores que tradicionalmente han estado fuera del alcance de los proveedores de desarrollo de la mano de obra. Los centros de trabajadores adoptan un enfoque centrado en la comunidad y en los trabajadores que combina el desarrollo de la mano de obra con la educación popular, el desarrollo del liderazgo, la organización de la comunidad y la defensa de políticas para proporcionar apoyo a las poblaciones con menos recursos y perseguir mejoras a largo plazo en las normas laborales de las industrias con salarios bajos y en la comunidad en general.
Los centros de trabajo demuestran que trabajar en la intersección del desarrollo de la mano de obra y la aplicación de las normas laborales puede crear nuevas oportunidades para transformar el trabajo de bajos salarios. Este enfoque pone en marcha mecanismos para mejorar los entornos de trabajo y la remuneración de las competencias de los trabajadores por parte de los empleadores, cuestiones que deben abordarse para que el desarrollo de la mano de obra cree verdaderos itinerarios profesionales y movilidad socioeconómica para los trabajadores con salarios bajos.
Los centros de trabajadores son un modelo de cómo la organización comunitaria y la defensa de políticas son herramientas importantes necesarias para cambiar el tejido mismo del sistema de desarrollo de la mano de obra, así como otros sistemas adyacentes que contribuyen a la desigualdad. Los centros de trabajadores crean coaliciones que centran y aprovechan el poder colectivo de los trabajadores con salarios bajos y de las comunidades desfavorecidas. El resultado es transformar las normas laborales de la industria de bajos salarios y aumentar el acceso de los trabajadores a las oportunidades socioeconómicas.
Mientras el país se centra en la recuperación económica de la pandemia de COVID-19, los investigadores subrayan que es necesario un enfoque holístico y global del desarrollo de la mano de obra para atender de forma significativa a las comunidades más desfavorecidas, mejorar las industrias con las condiciones laborales más degradadas y trabajar en todos los sistemas (por ejemplo, el sistema de justicia penal, el sistema de inmigración) para promover el bienestar económico de todos los californianos.